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La AP de Santander define un plan de acción para acabar con el acceso de intrusos a la zona de servicio del Puerto

Esta misma mañana se ha celebrado una reunión extraordinaria del Comité Consultivo de Protección de la Autoridad Portuaria de Santander, al que por la relevancia del asunto a tratar han asistido, además de los miembros que habitualmente lo componen,  Jaime González, presidente de la Autoridad Portuaria de Santander; Luis del Castillo, coronel jefe de la XIII Zona Guardia Civil; Héctor Moreno, jefe superior de la Policía Nacional en Cantabria; Cristina López, directora de la APS y representantes de la naviera más afectada por el problema, Roberto Castilla, por Brittany Ferries y Modesto Piñeiro, por la consignataria Modesto Piñeiro.

  • Última actualización
    07 febrero 2020 14:03

Dado que el problema era sobradamente conocido por todos los asistentes, se ha abordado directamente la propuesta de soluciones. Para ello, la directora de la Autoridad Portuaria de Santander ha presentado un plan de medidas con distintos plazos de aplicación, desde medidas de mejora operativa, que se pondrán en práctica desde esta misma noche, hasta medidas a más largo plazo, que incluyen la redacción y ejecución de un Plan Director de Seguridad del Puerto de Santander, que ayude a definir las mejores prácticas y equipamientos existentes en el mercado para implantar adecuadamente el Plan de Protección del Puerto.

Todos los miembros del Comité han participado activamente en la exposición realizada y han valorado positivamente la batería de medidas aportadas por la Autoridad Portuaria, de las cuales se dará cumplida cuenta en el próximo Consejo de Administración de la entidad.  

Por parte del presidente de la Autoridad Portuaria, se ha incidido en que el Organismo que preside “dedicará todo el esfuerzo que sea necesario para luchar contra esta lacra que tanto está dañando a nuestros clientes, a Brittany Ferries, a la Comunidad Portuaria y por supuesto a la Autoridad Portuaria de Santander”.

El objetivo conjunto es reducir la problemática existente en el corto plazo a niveles que resulten irrelevantes, tanto para la seguridad e integridad física de los propios intrusos, como para los intereses comerciales de la comunidad portuaria.