VALENCIA. La operación, que requirió la colaboración de varias entidades de seguridad y emergencia, concluyó con éxito tras dos detonaciones controladas que eliminaron la carga explosiva del artefacto.
El hallazgo, notificado por la empresa de dragados ‘Jan de Nul’, se produjo durante los trabajos de la draga ‘IBL Battuta’. El Centro de Operaciones de Vigilancia y Acción Marítima (COVAM) de la Armada, alertado por el descubrimiento, activó de inmediato a un Equipo de Desactivado de Explosivos (EDE) de la Unidad de Buceadores de Medidas Contraminas (UBMCM).
Tras un análisis preliminar de las imágenes, los expertos identificaron la bomba ‘Legionaria’ y estimaron que contenía aproximadamente cinco kilogramos de TNT en su interior. A pesar de que la espoleta parecía estar dañada, el detonador y el multiplicador se encontraban intactos, lo que representaba un riesgo significativo y justificaba la decisión de neutralizar el artefacto ‘in situ’.
Para garantizar la seguridad de la operación, la Comandancia Naval de València coordinó una reunión con la Policía Portuaria, la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía y el Servicio de Emergencias del Puerto de Valencia. Se estableció un perímetro de seguridad de 300 metros en tierra y se detuvieron temporalmente los trabajos de dragado en la zona.
La neutralización se llevó a cabo en dos fases. En un primer momento, se utilizó una retroexcavadora para crear un “hornillo” donde se colocó la bomba. Los especialistas realizaron una detonación controlada con cargas especiales para abrir el cuerpo de la bomba y deflagrar su carga principal. Esta primera detonación fue efectiva y eliminó la mayor parte del TNT. Sin embargo, al comprobar que los restos del detonador y la espoleta seguían intactos, se procedió a una segunda y más pequeña explosión controlada para eliminarlos por completo.
Una vez neutralizado el artefacto, el EDE de la UBMCM recuperó sus restos para su depósito final en un punto limpio de su base.