IBIZA. Los primeros pasajeros que harán uso de las nuevas instalaciones serán los pasajeros del ferry “Eleanor Rosselvet” de Baleària, que tiene prevista la llegada a las siete y cuarto de la tarde procedente del puerto de Denia y con destino a Barcelona.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), Jaume Colom, valora la construcción de esta infraestructura como “la obra culminante del trabajo que desde la APB hemos ido haciendo en el ámbito de la integración Port-Ciutat durante los últimos veinte años” y que mejora la experiencia de utilización de las instalaciones por parte del pasajero, “quien podrá disfrutar tanto de la estación como de las magníficas vistas sobre Dalt Vila”.
La APB adjudicó las obras de construcción de la nueva estación marítima en abril de 2019 a la UTE Comsa-MAB, por un presupuesto de 16.330.960,06 euros. El nuevo edificio, que busca la tradición de la arquitectura ibicenca usando líneas rectas, el color blanco y la piedra arenisca de tonos rojizos, cuenta con todos los servicios para hacer frente a las necesidades de los pasajeros, teniendo como prioridad el cumplimiento de las medidas de seguridad y accesibilidad. Ofrece a los usuarios amplias zonas de salas de espera y circulación que permitirán realizar operaciones de embarque y desembarque por separado. Por otra parte, la EM del Botafoc cuenta con todas las comodidades para garantizar el confort que se busca para los pasajeros. Además permite dar servicio de forma simultánea a hasta seis barcos.
La nueva estación marítima se ubica entre los pantalanes Norte y Sur de los muelles del Botafoc y está separada unos 30 metros del mar. Tiene unos 6.580 metros de superficie construida entre las dos plantas y la entreplanta. La planta baja alberga los servicios de preembarque y los controles de seguridad, mientras que la entreplanta dispone de despachos. La planta superior está concebida como cubierta transitable que sirve para acceder a las pasarelas de embarque y desembarque.
El proyecto final de la nueva estación marítima nace a partir del proyecto ganador de un concurso de ideas que tuvo como jurado al Ayuntamiento de Eivissa, la Asociación Patronal de Empresarios de Actividades Marítimas de Baleares (APEAM) , el Colegio de Arquitectos, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Baleares y la APB. Por último, el proyecto que licitó la APB recibió informe favorable de la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Eivissa.
Esta infraestructura completa el objetivo marcado en el Plan Director de Infraestructuras del puerto de Eivissa que establece el traslado a los muelles del Botafoc de las operaciones portuarias más molestas para la ciudad, como son el embarque y el desembarco de mercancías y pasajeros de línea regular y poder así descongestionar el muelle de Llevant, hoy convertido en el paseo de la Marina.