En un sector tan eminentemente exportador como lo es el cerámico, cualquier modificación en el panorama marítimo mundial tiene sus consecuencias. La evolución de los fletes durante los últimos meses es el fiel reflejo de esta situación.
Después de 22 semanas consecutivas de aumentos, puede decirse que el precio por embarcar un contenedor -sobre todo en Asia hacia el resto del mundo- ha detenido su inexorable escalada. El World Container Index, elaborado por Drewry, se mantenía la pasada semana estable en 10.377,19 por FEU, aunque es un 329% más alto que la misma semana del año pasado. Casi ningún sector industrial y económico del mundo podría afrontar esta presión.
El parón en la subida se produce después de los anuncios de navieras como CMA CGM y Hapag-Lloyd, que han decidido no incrementar más estos precios en los próximos meses.
Así y todo, la tarifa por embarcar un contenedor en Shanghai hacia Génova aumentó hasta los 13.646 dólares, frente los descensos en la ruta entre Nueva York y Rotterdam. De manera similar, el precio entre Los Ángeles y Shanghai, y Shanghai y Nueva York cayó un 3% y un 2%, respectivamente.
Por otro lado, el flete entre Shanghai y Rotterdam, Rotterdam y Shanghai, Shanghai a Los Ángeles y de Rotterdam a Nueva York se mantuvieron estables en el nivel de las semanas anteriores. Drewry espera que las tasas se mantengan estables durante la próxima semana.
Tras 22 semanas consecutivas de aumentos, el precio por embarcar un contenedor -sobre todo en Asia hacia el resto del mundo- ha detenido su escalada
Acceso Norte al puerto de Valencia y Corredor Mediterráneo, las infraestructuras pendientes y urgentes La industria cerámica está muy preocupada por la subida en los costes que se ha ido produciendo durante los últimos meses. La patronal ASCER prevé que a cierre de año los costes pasen del 13% de sus ventas al 20%.
A los incrementos de los costes energéticos, sin duda los que más están amenazando al clúster porque llegan por varios frentes (mercado regulado del carbono, peajes en la distribución de gas, inseguridad en el futuro de los cogeneradores o el Fondo Nacional de Sostenimiento del sistema energético que puede acabar en la factura que se pase al sector), se suman los de distribución y transporte.
La cadena de distribución cerámica ha perdido competitividad y, por ello, desde ASCER “demandan al Gobierno (tanto regional como nacional) una mayor implicación de apoyo al sector industrial. No queremos subvenciones, pero tampoco soportar costes adicionales a los que nuestros competidores no tienen que hacer frente”.
Sus principales competidores mundiales, Turquía, China e India, no están en procesos de transformación ambiental como está sucediendo en la Unión Europea “y no se puede entrar en la guerra de hacer pagar derechos aduaneros de emisión porque entraríamos en una batalla campal en temas de aprovisionamiento y energéticos. Es una coyuntura mucho más grave de lo que la consideramos y valoramos”, subraya Francisco Ramos, tesorero de ASCER.
Además, a esto se le añade el coste de un contenedor “que ha evolucionado de una manera brutal desde el inicio del año. Los aprovisionamientos de palés, soporte básico para nuestra expedición, también se ha puesto por las nubes y el precio del transporte ni nombrarlo”, asevera Ramos.
Infraestructuras
“Somos una industria eminentemente exportadora que depende de las infraestructuras de transporte para ser competitiva. Valencia y el Mediterráneo son nuestras grandes lanzaderas en la internacionalización de nuestro negocio, representan el 75% de nuestras ventas. Es crítico contar con infraestructuras de transporte si queremos que el azulejo español siga expandiendo su presencia en el mundo”, alerta el vicepresidente de ASCER, Ismael García Peris.
“El Acceso Norte falta desde hace años y es fundamental que no se retrase”
Por ello, sus dos principales reivindicaciones son: el Acceso Norte al puerto de Valencia y el desarrollo del Corredor Mediterráneo. “Este Corredor facilitará un mayor y más ágil acceso del azulejo español a los mercados europeos. La UE representa el 41% de nuestras ventas internacionales y esta conexión directa con el corazón de Europa sería un gran acelerador para nuestras exportaciones intracomunitarias reduciendo tiempos y costes en el transporte”, asevera García.
En esta línea, no hay que olvidar que el material cerámico es un producto de alto peso unitario y, por tanto, es un candidato natural al transporte por ferrocarril. “Hay un factor importante que puede potenciar este tema y es que a partir de 2026 el transporte por carretera estará dentro del comercio de emisiones por lo que previsiblemente los precios del transporte se incrementarán”, recuerda el vicepresidente, de ahí la importancia del fomento del transporte de mercancías por ferrocarril y de que el Corredor Mediterráneo cumpla los plazos y se pueda llegar al objetivo 2030 de la Unión Europea.
Sobre el Acceso Norte, el presidente de ASCER, Vicente Nomdedeu, lo tiene claro: “El Acceso Norte se está demorando mucho y lo que tardará... Lo cierto es que falta desde hace años y es fundamental que no se retrase. Si no tengo la mejor estructura ni tengo los mejores costes, mi producto es más caro y más difícil de llevarlo al cliente”.