“La pérdida es de más de 2.000 millones de euros por cada mes que se suspendan las operaciones”
Cuando el Covid-19 saltó de las fronteras chinas y se hizo evidente que la crisis sanitaria no sería cuestión de un país o de un continente, el sector del crucero fue el primero en amarrar la flota.
- 07 mayo 2020 01:00
- Última actualización
07 mayo 2020 08:16
Se prepararon y priorizaron la salud de sus tripulaciones y clientes. Fueron momentos de tensión, de tener que combinar coordinación, eficiencia y sensibilidad con las personas que estaban fuera de sus hogares y con los nervios a flor de piel. Ahora toca hablar del futuro. Por ello, para conocer cómo se encuentran y qué previsiones tienen las empresas del sector, este Diario entrevista a Alfredo Serrano, director de CLIA España, asociación que representa a las principales navieras y agentes de la industria crucerística del país.
Para empezar,¿cuál es la situación actual del sector?
El sector de los cruceros fue el primer sector que decidió suspender las operaciones de forma voluntaria desde el 14 de marzo de 2020. Nos concentramos desde el primer momento en el regreso seguro y sin contratiempos de las personas que se encontraban a bordo y que se vieron afectadas por esta decisión.
A fecha de 29 de abril de 2020, el 97,9% de los buques CLIA no tienen pasajeros. No hay naves que tengan que completar su itinerario final. Un buque está actualmente atracado con la tripulación en cuarentena. Tres buques están actualmente en puerto, de los cuales algunos tienen algunos pasajeros a bordo que se enfrentan a problemas de desembarque, ya que sus países de origen tienen restricciones que impiden la repatriación por el momento.
“Nos adaptaremos a la nueva situación reforzando aspectos medioambientales, de salud y seguridad y a las necesidades y expectativas de los viajeros”
¿Cómo fueron los primeros momentos tras la suspensión de operaciones?
En esta situación sin precedentes que afecta a todo el mundo, la industria de cruceros ha tratado de hacer lo correcto para todos los afectados. La suspensión voluntaria de las operaciones en todo el mundo tenía por objeto ayudar a las autoridades de salud pública y a los gobiernos de todo el mundo a contener el virus.
Devolver todos los barcos a puerto ha sido un proceso increíblemente complejo, pero estamos muy orgullosos de haber desempeñado nuestro papel en un extraordinario esfuerzo global con equipos de personas que trabajan día y noche para coordinar un regreso seguro a puerto, bajo la dirección de los gobiernos y las autoridades sanitarias en cada paso.
Las restricciones de vuelo, los cierres de puertos y las restricciones de desembarque han creado muchos desafíos en cuanto a la repatriación de muchos pasajeros, pero las líneas de cruceros se han centrado en la salud y la seguridad de todos los involucrados.
Acogimos con beneplácito las directrices emitidas hace unos días por la Comisión Europea sobre la protección de la salud y la repatriación de la gente de mar y los pasajeros a bordo de los buques. Creemos que la cooperación entre los gobiernos nacionales es esencial para ayudar a las personas de todas las nacionalidades a desembarcar y volver a sus hogares, y estas directrices son un paso importante en la dirección correcta.
Por otro lado, las navieras están adecuando sus plantillas a la situación. Están acelerando las vacaciones todo lo que pueden y retrasando los embarques. Hay que tener en cuenta, además, que algunos puertos están cerrados para barcos de pasajeros, que las conexiones aéreas son escasas, que existen limitaciones para que ciertas nacionalidades viajen, que los consulados que deben emitir visados están trabajando al ralentí debido a las cuarentenas establecidas, que algunos países están rechazando el retorno incluso de sus propios ciudadanos si no han pasado previamente un análisis medico realizado por sus propios doctores antes de que puedan embarcar en el avión de regreso, por lo que las navieras se encuentran con los mismos problemas logísticos, a los que se encuentran los clientes, para repatriar a su tripulación.
“Nuestro sector ha experimentado un crecimiento del 60% en los últimos diez años y basamos nuestro éxito en la creatividad, variedad de productos que ofrecemos e innovación”
¿Tienen algunas cifras que nos puedan dar una idea de lo que ha supuesto la crisis sanitaria mundial al sector?
Sí. Cada día de suspensión se produce la pérdida de 30 puestos de trabajo directos y 84 en total en España.
Si la suspensión continúa durante 60 días, el resultado será: una pérdida económica directa para España de unos 221 millones de euros, 1.820 puestos de trabajo y 66 millones de euros en salarios; y una pérdida económica total para España de unos 598 millones de euros, 5.036 puestos de trabajo y 172 millones de euros en salarios.
Si la suspensión continúa durante 90 días, el resultado será: una pérdida económica directa para España de unos 363 millones de euros, 2.996 puestos de trabajo y 109 millones de euros en salarios; y una pérdida económica total para España de unos 985 millones de euros, 8.288 puestos de trabajo y 283 millones de euros en salarios.
El sector del crucero, ¿puede verse incluido en las medidas de apoyo económico a la actividad del transporte?
El sector de los cruceros no ha solicitado ninguna ayuda específica al Gobierno, aunque hay que señalar que es primordial cualquier iniciativa que ayude a la subsistencia de nuestro ecosistema y a los destinos en general.
No olvidemos que la actividad de nuestra comunidad apoya a las agencias de viajes, aerolíneas, hoteles, restaurantes y una amplia cadena de suministro de industrias que se extiende por todo el mundo, de las cuales la gran mayoría son pequeñas empresas y autónomos.
En todo el mundo, la industria de cruceros respalda aproximadamente 1,17 millones de empleos y anualmente aporta 150 mil millones de dólares americanos a las economías mundiales.
En España genera 4.300 millones de euros creando 33.000 empleos. La mayoría del empleo generado en España es en pymes y autónomos (consignatarios, provisionistas, restauración, guías, pequeño comercio, agencias de viaje, etc.). Estas personas se están viendo muy duramente afectadas por el parón de nuestra actividad y requieren de una ayuda hasta que nuestros barcos puedan regresar.
“El sector de los cruceros no ha solicitado ninguna ayuda específica al Gobierno, aunque hay que señalar que es primordial cualquier iniciativa que ayude a la subsistencia de nuestro ecosistema y a los destinos en general”
El diretor de CLIA se muestra esperazando tras la confirmación de las agencias en los grandes mercados emisores de que las reservas para 2021 son superiores a las del año pasado por estas fechas. “El impacto del Covid-19 no se está sintiendo en las reservas de 202, lo que nos hace ser un poco más optimistas”Es complicado poder hablar del futuro, pero ¿qué previsiones tienen a corto y medio plazo? ¿De qué cifras estamos hablando?
En términos de pérdidas operativas hasta la fecha, según la información que disponemos, un operador de tres barcos sufrirá pérdidas en los próximos dos meses de más de 20 millones de euros. La extrapolación de esta cifra en todo el sector conduce a una pérdida total de más de 2.000 millones de euros por cada mes que se suspendan las operaciones. Esta cifra representa la pérdida neta, después de tener en cuenta los ahorros operativos.
Asimismo, deben considerarse los impactos indirectos e inducidos por nuestra actividad en todo lo referente a proveedores, agentes de viaje, líneas aéreas, hotelería y restauración, impuestos, etc. Nos tememos que el impacto en toda la cadena de valor será muy superior.
Por otro lado, el impacto del Covid-19 no se está sintiendo en las reservas de 2021. Las agencias en los grandes mercados emisores afirman que las reservas para 2021 son superiores a las del año pasado por estas fechas, lo que nos hace ser un poco más optimistas de cara al futuro.
¿Qué reclamaciones hacen a las autoridades públicas? ¿Cuáles son en su opinión las principales carencias de las medidas económicas presentadas (tanto a nivel nacional como europeo)?
CLIA presentó un documento a la Comisión Europea pidiendo una serie de ayudas para el sector y así, atenuar el impacto que toda la industria pueda sufrir, las cuales esperamos que sean tomadas en consideración.
Igualmente, representantes de diferentes segmentos del turismo han reclamado también la puesta en marcha de intervenciones económicas específicas para el sector turístico, al tiempo que se ha incidido en la importancia de mantener la liquidez para asegurar el futuro.
Urge conocer información estratégica, como por ejemplo cuáles serán las condiciones para viajar en crucero, aforo, distancias de seguridad, etc. ¿no? ¿Hay algún grupo de trabajo en el que la industria crucerística esté representada?
Es demasiado pronto para discutir procedimientos específicos que se están desarrollando. Nuestra prioridad es garantizar la seguridad de los huéspedes, nuestra tripulación y las comunidades que visitan las líneas de cruceros y actualmente estamos trabajando con expertos médicos y autoridades de salud a nivel internacional para sentar una nueva base para la industria de cruceros a medida que se prepara para una recuperación a medio y largo plazo.
Estamos en constante contacto con diferentes actores del sector y coincidimos en la necesidad de construir una alianza fuerte de cara al futuro tras el Covid-19.
Además, estamos participando en paneles de expertos y ministeriales con distintas asociaciones, foros y organismos internacionales, incluyendo la Organización Mundial del Turismo (OMT) o el Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC, por sus siglas en ingles).
Es importante hacer una campaña de promoción dirigida a los ciudadanos que exponga las bondades del turismo, que supere, además, el déficit reputacional que arrastra nuestro sector, algo impensable en otros sectores con igual peso económico. Y eso lo conseguiremos a partir de la unidad.
EL DATO
1,17 millones de empleosEn todo el mundo, la industria de cruceros respalda aproximadamente 1,17 millones de empleos y anualmente aporta 150.000 millones de dólares americanos a las economías mundiales. En España genera 4.300 millones de euros creando 33.000 empleos.
¿El Covid-19 ha obligado a las compañías navieras a cancelar proyectos, pedidos de nuevos buques y compras de material auxiliar?
Como hemos mencionado antes, casi la totalidad de la flota de CLIA no está navegando y sabemos que se están revisando las políticas de inversiones. Necesitamos que haya un calendario claro y coordinado con otros mercados europeos para la reapertura del sector.
Y finalmente, ¿cómo se imagina la actividad crucerística de ahora en adelante? ¿Se abre un nuevo escenario en el que habrá que buscar un nuevo perfil de pasajero?
Es todavía pronto para asegurar el futuro del sector. Seguramente cambien muchas cosas, no solo los planes de inversión, sino también la percepción del turismo y la importancia de este para la economía española.
Nuestro sector ha experimentado un crecimiento del 60% en los últimos diez años y basamos nuestro éxito en la creatividad, variedad de productos que ofrecemos e innovación. Nos adaptaremos a la nueva situación reforzando aspectos medioambientales, de salud y seguridad y a las necesidades y expectativas de los viajeros.