El presidente de la CEV, Salvador Navarro; el presidente de Cámara Valencia, José Vicente Morata; y el presidente de Propeller Valencia, Pedro Coca, participaban ayer en la presentación del estudio “Puerto de Valencia: La nueva terminal. Sostenibilidad, efectos socioeconómicos y necesidades”, elaborado por el Instituto de Transporte y Territorio de la Universidad Politécnica de Valencia, y encargado por la CEV, Cámara Valencia y Propeller Valencia.
Los tres representantes empresariales destacaron la minuciosidad del informe, y lo calificaron de “riguroso, ético y de calidad”. Asimismo, argumentaron que uno de los beneficios que tendrá la puesta en marcha de la nueva terminal será el empleo de calidad y altamente cualificado que generará. Sin embargo, los tres advirtieron de los perjuicios que conllevará para la economía y sociedad valencianas no poner en marcha un proyecto de estas dimensiones.
Pedro Coca, presidente de Propeller Valencia, invitó a la sociedad valenciana a “leer este estudio a la inversa, es decir, lo que podríamos perder”. Tras tildar de “interesados” algunos debates en torno al proyecto, hizo hincapié en los más de 44.000 empleos que generará el Puerto de Valencia una vez este en funcionamiento la terminal.
La política, por debajo
Salvador Navarro, presidente de la CEV, pidió “dejar por debajo de los argumentos técnicos los que son políticos”, en referencia a la ausencia de pronunciamiento del Gobierno en torno a la necesidad de una nueva Declaración de Impacto Ambiental. Para Navarro, “es momento de que los técnicos de Puertos del Estado y del Ministerio de Transportes se pronuncien”. Navarro está convencido de que la Autoridad Portuaria de Valencia “convertirá en positivo” esas alegaciones negativas, reforzando aún más el proyecto constructivo definitivo.
Por su parte, José Vicente Morata, presidente de Cámara Valencia y del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, recordó la industria y el tejido innovador creado al albur del desarrollo de la Alta Velocidad, propiciando la presencia internacional de las empresas ferroviarias españolas en todo el mundo, algo que podría trasladarse con la puesta en marcha de la nueva terminal.
Morata incidió en que la mayor parte del comercio mundial se realiza por vía marítima. “La infraestructura está hecha. Al final, debe haber un pronunciamiento positivo del Gobierno con todas las salvedades ambientales”. Y advirtió: “Si no se hace aquí, se hará en otro puerto”.
El informe pone negro sobre blanco los beneficios de la nueva terminal. Foto: Raúl Tárrega.
Vicent Esteban Chapapría: “Debemos esperar al proyecto definitivo para valorar la necesidad de una nueva DIA”
El equipo que ha liderado el informe está encabezado por Vicente Esteban Chapapría, catedrático de Puertos y Costas de la escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos. Chapapría pidió que no se demonice el proyecto antes de tener un documento definitivo.
“Lo que hay ahora es un anteproyecto. Comparar la DIA de 2007, elaborada a partir de un proyecto definitivo, con un anteproyecto que estudia todas las opciones, es aventurado. Debemos esperar para saber si es necesaria o no una nueva DIA”, remarcó.
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