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Los fletes y la falta de contenedores impulsan a buscar alternativas para mover la mercancía

El transporte marítimo se encuentra en una situación delicada. La tendencia al alza de los fletes y la falta de contenedores, entre otros retos, está obligando a buscar alternativas para mover las mercancías a nivel global.

  • Última actualización
    01 octubre 2021 15:55

Ejemplo de ello son las 20.000 toneladas de Ácido Tereftálico Purificado (PTA) que llegaron en la bodega del “Venture Breeze” a finales de la semana pasada a la terminal de Grup Mestre-Sammer en el Port de Barcelona. Se trata de una carga que habitualmente se transporte en contenedor pero que dadas las circunstancias se ha optado por su transporte en bolsas (big-bags).

“Por la situación actual a nivel mundial respecto al tráfico de contenedores, se ha tenido que montar esta mercancía en convencional”, inciden, “como el resto de mercancía que trae este buque, que lleva también ánodos de carbono, que van en tránsito”. Se trata, recuerdan, de mercancías que por sus características y a nivel logístico “es mejor transportarlas en contenedor”.

Al “caos” existente, con mercancías incluso pendientes de embarcar y colapsos en los puertos, se suman las consecuencias del Canal de Suez y del COVID-19. “La cadena logística no es una máquina con botón, es todo un engranaje que, cuando uno de ellos falla, hay que buscar soluciones, como es el caso de este tipo de mercancía. Un cambio para resolver la problemática surgida”, señalan desde Mestre-Sammer.

A este respecto, por la propia dinámica del sector y con la esperanza de volver “al sistema anterior”, se prevé una relocalización de la producción.  

“La cadena logística no es una máquina con botón, es todo un engranaje que, cuando uno de ellos falla, hay que buscar soluciones, como es el caso de este tipo de mercancía. Un cambio para resolver la problemática surgida”

Buque “Venture Breeze" en la terminal de Grup Mestre en el Port de Barcelona. La terminal Grup Mestre-Sammer acoge la operativa de carga y descarga de 30 palas de aerogeneradoresLa terminal de Grup Mestre-Sammer acogió el viernes el inicio de una operativa de carga de proyecto, a bordo de concretamente el buque “Venture Breeze”, que partió desde China para llegar al Port Barcelona, como puerto de tránsito, con 30 palas de aerogeneradores de 62 metros de largo y 15 toneladas de peso. La previsión es que esta tarde finalice la operativa y, paralelamente, el buque “Artic Rock” atracará para cargar de nuevo las palas, que partirán el martes hacia su destino: Francia.

En la operativa participan también DSV Global Transport and Logistics como empresa encargada del fletamento de los barcos desde origen a destino, a través de su departamento de Proyectos Industriales especialistas en logística de carga sobredimensionada, y New Maritime Group como agente de carga en España.

Raúl Ramírez, director de Operaciones de New Maritime, incide en la importancia del personal, del espacio en la terminal y del equipamiento para garantizar una labor óptima.

Lo que más caracteriza a esta operativa, explica, “son las grandes dimensiones de las palas y la distribución de pesos”.

Los servicios e infraestructuras que se necesitan “son terminales amplias que tengan buenos radios de giro para los camiones y que haya espacio para almacenar las palas”

En este sentido, el “principal inconveniente” es la longitud de las palas, “que al izarlas y arriarlas siempre hay que intentar buscar que estén en horizontal y por ello utilizamos dos grúas”, lo que requiere también “muy buena coordinación”.

Los servicios e infraestructuras que se necesitan en una labor como esta, y debido a las grandes dimensiones de los elementos, “son terminales amplias que tengan buenos radios de giro para los camiones y que haya espacio para almacenar las palas”.

A ello se suma que, debido a las especificaciones de la carga, “los gradientes de las pendientes de la terminal no pueden pasar de 1 o 2 grados en las distintas posiciones”.Por otra parte, a nivel de descarga, en el caso de estas palas se han utilizado grúas móviles. Asimismo, es fundamental la resistencia de los muelles.

Entre coordinadores, capataces y personal en general, la operativa de descarga y carga de las palas en el Port de Barcelona ha requerido la intervención de en torno a 25 personas, además de los profesionales de tierra.