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Los portacontenedores y buques de pasaje deberán conectarse a la electricidad en los puertos a partir de 2030

Con el fin de reducir significativamente la contaminación atmosférica en los puertos, los portacontenedores y los buques de pasaje estarán obligados a utilizar el suministro eléctrico en tierra para todas las necesidades de electricidad mientras estén atracados en los muelles de los principales puertos de la UE a partir de 2030.

BRUSELAS. El Parlamento Europeo ha aprobados nuevas normas para combustibles marítimos más ecológicos e incrementar el número de estaciones de recarga.

En el caso de los combustibles marítimos, durante las negociaciones con el Consejo, se aseguraron de que los buques tendrán que reducir gradualmente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) reduciendo la cantidad de GEI en la energía que utilizan (por debajo del nivel de 2020) en un 2% a partir de 2025 y en un 80% a partir de 2050.

Esto se aplicaría a los buques de más de 5.000 toneladas brutas, responsables en principio del 90% de las emisiones de CO2, y a toda la energía utilizada a bordo en los puertos de la UE o entre ellos, así como al 50% de la energía utilizada en los viajes cuyo puerto de salida o llegada esté fuera de la UE o en regiones ultraperiféricas de la UE.

Las nuevas normas también establecen un objetivo de uso de combustibles renovables del 2% a partir de 2034 si la Comisión informa de que en 2031 los combustibles renovables de origen no biológico (RFNBO) suponen menos del 1% de la mezcla de combustibles.

En palabras de Jörgen Warborn, ponente parlamentario sobre combustibles marítimos sostenibles: “La nueva normativa establece con diferencia la vía más ambiciosa del mundo para descarbonizar el transporte marítimo. Se centra en el 90% de las emisiones marítimas de CO2 al tiempo que protege a los armadores y puertos más pequeños de los costes y las cargas administrativas. Hacen de Europa la pionera en la creación de una demanda de combustibles sostenibles y en el fomento de la innovación”.

Estaciones de recarga

Los eurodiputados negociaron con éxito que las estaciones de recarga eléctrica para coches, con una potencia mínima de 400 kW, tendrán que desplegarse al menos cada 60 km a lo largo de las rutas principales de la red RTE-T para 2026, y que la potencia de la red aumentará a 600 kW para 2028.

En el caso de camiones y autobuses, las estaciones de recarga deberán instalarse cada 120 km. Estas estaciones deberán estar instaladas en la mitad de las principales carreteras de la UE para 2028 y con una potencia de 1400 kW a 2800 kW dependiendo de la carretera. Los países de la UE tienen que garantizar que las estaciones de repostaje de hidrógeno a lo largo de la red principal de la RTE-T se desplegarán al menos cada 200 km para 2031.