Estas inversiones, tanto ferroviarias como viarias, tienen como objetivo reforzar la competitividad del Puerto de Algeciras y del Estrecho de Gibraltar en el actual escenario mundial.
En un encuentro de trabajo celebrado en la sede de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA), tanto su presidente como su director general, Gerardo Landaluce y José Luis Hormaechea, respectivamente, han detallado a Pardo de Vera las infraestructuras pendientes, incidiendo en la necesidad de contar con un cronograma detallado del conjunto de actuaciones hasta 2030 tanto en la Algeciras-Bobadilla, como en el resto del Ramal Central de los corredores Mediterráneo y Atlántico. Asimismo Landaluce ha insistido en la apuesta público-privada de la autopista ferroviaria Algeciras-Zaragoza y ha agradecido los pasos dados por el Ministerio de Transportes (Mitma) para permitir su puesta en marcha cuanto antes. Sobre este punto, Pardo de Vera ha mostrado su entusiasmo porque “va a suponer un punto de inflexión en la historia del transporte de mercancías por ferrocarril”.
También en el apartado ferroviario, Landaluce y Hormaechea han detallado a Pardo de Vera los proyectos de la denominada Última Milla para dotar de mayor capacidad al Puerto de Algeciras para operar convoyes teniendo en cuenta la creciente demanda de los clientes para ofertar una salida competitiva y sostenible al tráfico de import/export y que llevará a que en las próximas semanas el recinto supere por primera vez los 1.000 trenes anuales.
En cuanto a la accesibilidad viaria, desbloqueada tras 25 años con el inicio de las obras del Acceso Sur, la Autoridad Portuaria ha repasado las mejoras pendientes como la nueva variante de la Bahía de Algeciras, la duplicación del túnel del Acceso Norte a la ciudad, así como el desdoble de la N-340 entre Algeciras y Tarifa, teniendo en cuenta en este último caso, la propuesta de la Comisión Europea para incluir el Puerto de Tarifa, el único de Europa con línea marítima con la ciudad de Tánger, en la lista de nodos Comprehensive de la Red Transeuropea de Transportes (RTE-T).
En el encuentro con el equipo directivo de la APBA, en el que también ha participado el presidente de Puertos del Estado (OPPE), Álvaro Rodríguez Dapena, se han abordado asuntos como la optimización del Puesto de Control Fronterizo, donde Sanidad Exterior asume el 30% de las inspecciones que se realizan en los puertos de España que requiere una mejora de los procesos operativos para mantener la competitividad como puerta de entrada de mercancías, especialmente perecederos, frente a otros países europeos.
Respecto al Marco Estratégico del Sistema Portuario, Landaluce considera que debe ser una oportunidad para reforzar plantillas y las estructuras de personal fuera de convenio que, en el caso de la APBA, se mantiene congelada desde la última revisión de 2006 a pesar de que la actividad se ha duplicado y hasta triplicado en función de los tráficos.
Por último, en la agenda del encuentro las partes han abordado la situación actual del Emission Trade System (ETS) que promueve Bruselas para incorporar el transporte marítimo al régimen de comercio de derechos de emisión pero que, tal y como está planteada la propuesta inicial, tendría un previsible impacto negativo en los transbordos de los puertos del Sur de la UE en beneficio de terceros países y sin conseguir el objetivo de reducción de emisiones.