Varias empresas han mostrado su interés para hacerse con la concesión de la nueva Terminal G, ubicada en el Moll Adossat de Port de Barcelona, con la que se finalizará el traslado de toda la actividad crucerística a dicho muelle.
Barcelona. Ayer se celebró la reunión del Consejo de Administración de Port de Barcelona del mes de junio en la que se acordó relanzar el concurso público para la construcción y explotación de la futura Terminal G de cruceros en el Moll Adossat.
Este concurso ya había sido aprobado por el Consejo de Administración celebrado en el mes de noviembre de 2022, pero fue desestimado por el mismo órgano de gobierno el pasado marzo tras revisarse el Pliego de Bases a partir de las consultas dirigidas por las empresas interesadas.
Catalonia Cruise Terminal y una iniciativa conjunta de las navieras Norwegian Cruise Line, Vikingo Ocean Cruises y Virgin Cruises, ya se han mostrado interesadas en la nueva terminal
Según la AP de Barcelona, han mostrado su interés en el proyecto por un lado Catalonia Cruise Terminal C, perteneciendo al grupo Royal Caribbean; y por otro, una iniciativa conjunta de las navieras Norwegian Cruise Line, Viking Ocean Cruises y Virgin Cruises.
OPS instalados
Uno de los valores añadidos del concurso es la incorporación de importantes mejoras ambientales como el uso de energías renovables para la conexión a la terminal o la puesta en marcha de servicios que faciliten la movilidad sostenible de los pasajeros, como puede ser un servicio de autobuses que conecte la terminal con el aeropuerto del Prat o la estación de Sants, por ejemplo. En el mismo sentido, en cuanto a la explotación, todos los barcos construidos posteriormente al año 2010 deberán conectarse a la red eléctrica una vez estén atracados mediante los sistemas OP que se instalarán en todo el Moll Adossat. Los barcos que atraquen en este muelle también podrán proveerse de gas natural licuado (GNL).
La nueva terminal G será apta para recibir cruceros de hasta 400 metros de eslora
EL DATO
54mil
Metros cuadrados. La futura terminal contará con una superficie de 54.000 metros cuadrados y una línea de muelle de 450 metros.
La futura terminal G tendrá una superficie de concesión superior a los 54.000 metros cuadrados y una línea de muelle de 450 metros, unas dimensiones que la hacen apta para recibir cruceros de hasta 400 metros de eslora. Estas características quedan recogidas en el Pliego de Bases del concurso, que especifica que el adjudicatario tendrá que aportar un tráfico significativo como puerto base (embarque y/o desembarque) que es el que genera más valor añadido a la ciudad. Hay que destacar que actualmente los cruceristas de puerto base en Barcelona ya suponen casi el 58% del total.
Todos los cruceros en Moll Adossat
Tal y como destacaron ayer desde la Autoridad Portuaria de Barcelona, “la puesta en servicio de la terminal G será un paso importante para finalizar el traslado de la actividad crucerística al Moll Adossat, donde se concentrarán todas las terminales de cruceros y que está más alejado de la ciudad”.
Esta definición de 7 terminales, todas ellas ubicadas en el Moll Adossat, es uno de los puntos incluidos en el acuerdo firmado en enero de 2018 entre el presidente del Puerto de Barcelona, Sixte Cámara y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para mejorar la integración del puerto y la ciudad.
Además, desde Port de Barcelona, también han recordado que “el acuerdo prevé una serie de actuaciones que estarían acabadas en 2028 y permitirán mejorar la integración del puerto en la ciudad (desaparecen las actuales terminales Norte y Sur del World Trade Center y se abre a los ciudadanos este espacio) así como aumentar el impacto económico que este sector genera en Barcelona y mejorar los servicios que se ofrecen a las navieras y a los pasajeros”.