Según Toledo, "el real decreto ley tiene como objetivo disminuir la movilidad urbana al mínimo", un contexto en el cual en todos los puertos "el funcionamiento intrapuertos debe seguir" (carga, descarga de buques, movimiento interior de mercancías...).
No obstante, según el presidente de Puertos del Estado, "hay que tener en cuenta que las entradas y salidas de mercancías por vía terrestre de los puertos se verán afectadas por la medida restrictiva ya que se reducirán a las mercancías relacionadas con servicios esenciales", pues además debido a las medidas restrictivas habrá numerosas empresas que cierren y "ni emitirán ni recibirán mercancías".
Ante esta situación, según el presidente de Puertos del Estado, "los puertos deben prever almacenar la mercancía que se descargue y que no pueda salir del recinto y adaptar el ritmo de descargas a esa capacidad".