El Port de Barcelona cerró 2022 con un tráfico total de 66,4 millones de toneladas, superando en un 11,8% el total de 2020 y solo un 1,5% por debajo de 2019.
Por tipologías, destacó el tráfico de contenedores que registró en 2022 cifras récord, alcanzando los 3,5 millones de TEUs, lo que supuso un incremento del 19,3% respecto a 2020 y del 6,2% respecto a 2019.
Por lo que respecta a la carga convencional, mayoritariamente al tráfico ro-ro, ésta sumó un total de 397.000 UTIs movidos en 2022, con un incremento del 14,3% respecto a 2020 y un 3,4% por debajo de 2019.
En cuanto a los graneles sólidos, en 2022 el Port de Barcelona registró un total de 4,5 millones de toneladas, lo que representa un crecimiento del 9,9% y del 12,5%, en comparación con los años 2020 y 2019, respectivamente.
En referencia a los graneles líquidos, la suma de 2022 fue de 12,4 millones de toneladas, un 3,4% por debajo del total de 2020 y un 22,9% menos que en 2019.
Otro de los tráficos más afectados por la pandemia fue el de pasajeros, que sumó en 2022 cerca de 1,5 millones de personas, creciendo un 74,7% respecto a 2020. No obstante, el pasaje en el Port de Barcelona se mantuvo un 67,6% por debajo de los tráficos de 2019.
2022: DE ENERO A AGOSTO
El tráfico total de mercancías en el Port de Barcelona durante los ocho primeros meses de 2022 ha sido de 48,7 millones de toneladas, con un incremento del 9,9% respecto al mismo período de 2022; mientras que el tráfico de contenedores ha sido de 2,4 millones de TEUs, lo que representa un crecimiento del 1,5%.
Los principales tráficos del puerto han consolidado su crecimiento y, en muchos casos, han superado las cifras alcanzadas en 2019 gracias a la recuperación de la economía de su hinterland, que muestra su resiliencia frente a situaciones de incertidumbre global como la actual.