El puerto de Setúbal añade dos líneas más regulares de contenedores que operan en la Terminal Polivalente Zona 2
WEC Lines y ARKAS operarán dos nuevas líneas regulares desde el puerto de Setúbal
El Puerto de Satúbal cuenta con dos nuevas líneas regulares de contenedores que operan en la Terminal Polivalente Zona 2, en concesión a la empresa Sadoport.
SATÚBAL. Estos servicios consolidarán la oferta del Puerto de Setúbal en el mercado de contenedores, en el transporte marítimo de corta distancia europeo, especialmente en las conexiones con el Mediterráneo, las Islas Canarias y el norte de España.
La primera línea se denomina North Spain Canarian Service (NSC), operada por WEC lines y hace escala en los puertos de Setúbal, Sines, Casablanca, Bilbao, Gijón, Vigo, Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife. Tiene un servicio quincenal con una capacidad para 822 TEUs.
La segunda línea se denomina el Servicio Gran Péndulo (GPS), es operado por ARKAS Portugal y hace escala en los puertos de Salerno, La Spezia, Génova, Casablanca, Leixões, Setúbal, Marsella, Génova, La Spezia, Salerno, El Pireo, Mersin, Lattakia, Beirut, Alejandría y Salerno. Tiene un servicio mensual con capacidad para 1.445 TEUs. Se articula con otros operadores, reforzando la oferta existente de ARKAS y de los demás operadores en el Mar Mediterráneo.
Son ya 17 las líneas regulares del Puerto de Setúbal, entre carga rodada y contenedores, que ya se han beneficiado de la mejora de la accesibilidad marítima que se ha realizado en los últimos años en el puerto, y también de las inversiones en equipamientos y productividad, reforzando la mejora de la oferta a la creciente capacidad de exportación e importación de las empresas del sur de Portugal, especialmente de las regiones de Setúbal y Alentejo.
Este refuerzo de la conectividad marítima del Puerto de Setúbal responde también al posicionamiento de esta autoridad portuaria en relación con los compromisos de sostenibilidad medioambiental y descarbonización, reduciendo el tráfico rodado en las carreteras europeas, contribuyendo así a la reducción de los gases de efecto invernadero por tonelada kilómetro, a la reducción de la congestión y los accidentes y a la sostenibilidad general del transporte.