(Mafalda muestra a Miguelito la tortuga, que esconde su cabeza dentro del caparazón).Miguelito: "Bueno, ¿y...?".Mafalda: "Ya está, encerrada, tal vez si hubieras venido antes...".Miguelito: "¿Cómo? ¿Y hoy ya no? ¡Es una barbaridad, yo vine especialmente!".Mafalda: "Lo siento, tendrá que ser mañana, hoy ya es imposible".Miguelito: "¿Y mañana, dentro de qué horario, más o menos?".Mafalda: "Y... no sabría informarte".Miguelito: "¡Bueh! Volveré mañana".(En la última viñeta, Miguelito, en la calle, se pregunta: "Y al final no me enteré por qué le puso ese nombre"). Tanto el famoso "Vuelva usted mañana" de Larra como la tortuga de Mafalda son dos formas exageradas, como otra cualquiera, para ilustrar uno de los males endémicos y, hasta cierto punto, necesarios, de las sociedades modernas. Es cierto que necesitamos dotarnos de una organización o estructura regida por procedimientos centralizados y descentralizados, en la que la división de responsabilidades, la especialización del trabajo, la jerarquía y las relaciones impersonales hagan posible el funcionamiento de la Administración pública.Pero la burocracia, que en su origen nació como herramienta para articular la simplificación administrativa, ha evolucionado hasta convertirse en un fin en sí mismo, en un tortuoso laberinto de trámites y papeleo, repleto de vericuetos legales y administrativos, en el que las empresas están condenadas a sobrevivir.En este sentido, resulta interesante situar las cosas en su debido contexto y, en esta caso, en un contexto internacional . Aunque la España de Larra queda muy lejos y la tortuga de Mafalda es argentina, aún arrastramos ciertos tics del "Vuelva usted mañana" y del "Eso, en la ventanilla de enfrente", aderezados con la inefable lentitud del aparato burocrático.El Banco Mundial ha publicado el estudio "Doing Business 2015 Spain" que mide la forma en la cual las regulaciones gubernamentales fomentan o restringen la actividad empresarial. Analiza las regulaciones que afectan a cinco etapas de la vida de una pyme local: apertura de una empresa, obtención de permisos de construcción, obtención de electricidad, registro de propiedades y comercio transfronterizo. En este último caso, analiza el proceso de exportación e importación desde Madrid a través de cinco puertos: Algeciras, Barcelona, Bilbao, Valencia y Vigo. Según el informe, que coloca a España en el puesto 33 del "Doing Business" de los 189 que conforman este ranking, en lo que se refiere al comercio transfronterizo, los resultados reflejan que importar y exportar por ví́a marítima en Españ̃a es relativamente eficiente si se compara internacionalmente ya que el nú́mero de documentos y el tiempo necesarios para importar y exportar son similares a la media de los paí́ses de altos ingresos de la OCDE, aunque el coste es más elevado.Una buena parte del tiempo necesario para importar y exportar un contenedor se destina a la preparación de la documentación. La puesta en marcha y extensión del proyecto de Ventanilla Única Aduanera se antoja, por tanto, una prioridad absoluta para los operadores y para la Administración. Pero no a paso de tortuga. Burocracia.