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Cuestión de imagen

Resulta evidente que el sector logístico tiene un serio problema de imagen pública en España dados sus bajos niveles de reconocimiento y atractivo entre los profesionales. Así lo refleja al menos el informe "Employer Branding 2015" de Randstad del que se hizo eco Diario del Puerto en su reportaje del pasado jueves. No resulta extraño, por tanto, que a pesar de los elevados índices de desempleo que soporta el país, para muchas empresas del sector logístico la búsqueda de personal cualificado siga siendo una tarea ardua y en muchos casos, infructuosa.

  • Última actualización
    28 septiembre 2018 18:09

De hecho, si miramos más allá, vemos que en el conjunto de Europa el 22% de las empresas aseguran tener problemas para encontrar trabajadores con los perfiles que necesitan y el 60% cree que los estudiantes que están a punto de incorporarse al mercado laboral tampoco cubrirán sus expectativas, según otro estudio ("Education to employment: getting Europe's youth into work") de la consultora McKinsey, que afirma que un tercio de los empleadores (el 33% frente al 22% de media europea) reportan que la falta de habilidades está causando problemas significativos para sus negocios. El estudio también responsabiliza del desajuste a las propias empresas, ya que solo la mitad de los empleadores encuestados informa a los proveedores de educación sobre las habilidades que demanda el mercado anualmente.A nadie se le escapa que el potencial de creación de empleo de la logística está generando la necesidad de nuevos profesionales que den respuesta a los requerimientos del mercado, lo que implica la aparición de especialidades cuyos contenidos propios de esta actividad se ajusten más a las necesidades empresariales. Todo ello, en un contexto en el que la logística cobra cada vez mayor importancia por su implicación en el éxito comercial y en la competitividad de las empresas, haciendo que España haya mejorado en eficiencia logística, como lo atestigua su mejor posición en Índice de Desempeño Logístico del Banco Mundial.Sin embargo, uno de los mayores retos que afronta hoy el sector logístico es la falta de profesionalización, conocimientos y experiencia en los técnicos y responsables de las distintas áreas integradas en la logística, así como cierta carencia de planes y programas formativos que respondan a esas necesidades y contribuyan a la adquisición de las competencias que el sistema productivo demanda para mejorar en competitividad logística, tanto en la actividad empresarial como en el aprovechamiento de las infraestructuras y la intermodalidad.Por ello, se antoja necesaria una racionalización y desarrollo de los esquemas ocupacionales, que actualmente adolecen de cierta indefinición, así como de los cauces formativos que dan lugar a la preparación de los profesionales, tanto en niveles universitarios como de formación profesional, pues en ambos hay serias lagunas y normalmente se configura con técnicos con formación de distintos ámbitos que adquieren los conocimientos al ingresar en el sector.La logística necesita profesionales, personas que verdaderamente deseen desarrollar una carrera en un sector que a los ojos del público sigue lastrada por una imagen poco atractiva. Pero cualquier operación de mercadotecnia o branding corporativo que pretenda poner en valor una determinada marca, en este caso la Logística, debe comenzar con el análisis de las causas de tal devaluación. Y eso es una tarea que exige una autocrítica difícil de hacer cuando se está instalado en la autocomplacencia.