Aunque todavía no se ha cerrado la cifra exacta de las donaciones realizadas para ayudar a la pequeña, podemos hablar de que será una cifra notable (y cuando digo notable hablo de que superará los 100.000 euros) porque los trabajadores portuarios de Coordinadora que han querido participar han aportado 100 euros de su jornal, lo que supone, a poco que se lo propongan, superar los 70.000 euros de recaudación. A esta cifra se habrán de sumar las realizadas por otras personas y entidades (empresas logístico portuarias o del Marítimo, el resto de colectivos de Coordinadora del resto de España, etc.) antes y durante la fiesta solidaria que se vivió el pasado domingo.Además de lograr que la pequeña reciba el mejor tratamiento posible (por cierto, si sobran fondos serán destinados a otros enfermos que lo necesiten), este esfuerzo colectivo volvió a subrayar el poder de acción y actuación de Coordinadora, un poder de convocatoria portentoso y digno de estudio y análisis por los sociólogos interesados en conocer y desentrañar las verdades soterradas en los colectivos profesionales. En serio. Creo que hoy por hoy, viendo la realidad económica actual, el de la estiba es uno de los pocos colectivos profesionales que quedan con fuerza para plantar cara a lo que sea necesario, ya sea en Luxemburgo ante una norma que creen perjudicial, injusta o ilegal; o en Valencia ante la enfermedad de una niña. Habrá quien les critique, constructiva y destructivamente, que hay gente para todo, pero lo que no se puede negar es que la iniciativa merece un aplauso. Ahora quizás nuestros esfuerzos solidarios tendrán que destinarse a los damnificados por el terremoto en Nepal. Quien pueda y quiera, que colabore.Mientras, cerca de allí, en Nueva Delhi, una delegación de empresarios españoles, entre los que también hay valencianos, acompañan al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, en una misión empresarial. El motivo del viaje es sencillo. El Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Banco Asiático de Desarrollo coincidieron hace unos días en sus previsiones: la economía india crecerá más rápido que el gigante chino en los próximos años. Los tres estiman un 7,5%, un 7,7% y un 7,8%, respectivamente, para 2015-2016 y aún mayor para el siguiente curso. Así que, nuestras empresas piensan en futuro y ponen los puntos sobre las íes ante las autoridades indias: la burocracia existente y la dilatación de los procesos de decisión son los principales obstáculos que se encuentran las empresas españolas a la hora de acometer proyectos de inversión en India. ¿Nos lo arregláis? Y ya que estáis, solicitamos más seguridad jurídica.Aunque la presencia empresarial española en India no cuenta con más de 10 años, los integrantes de la delegación subrayan el potencial que existe de que España e India sean socios estratégicos también en terceros países (Latinoamérica o África). Por el momento los servicios marítimos con el país se han multiplicado en los últimos cinco años y hoy prácticamente todas las navieras saben que India tiene que estar en sus rotaciones. De hecho, este país es uno de los que más crece en el tráfico de Valenciaport con incrementos del 50% en relación a 2014. Ahí es nada.