Se trató de un viaje de trabajo en el que tuve la suerte de visitar algunas de las mayores plataformas logísticas que operaban, y aún operan hoy, en Europa, además de algunos de los grandes puertos, como es el caso de Amberes y Zeebrugge.En aquel viaje, recuerdo que en Amberes nos explicaron que los cuatro grandes puertos de Flandes -el propio Amberes, Zeebrugge, Gante y Ostende- iban a realizar una serie de acciones internacionales conjuntas con un claro objetivo: unir sus fuerzas para presentarse en el exterior como la plataforma logística más potente de Europa. En aquella ocasión, pensé que no le hacía mucha falta al Puerto de Amberes aliarse con otro más pequeño, como pueden ser Gante u Ostende, para presentarse en cualquier lugar del mundo con unas credenciales que dejan poco margen de dudas ante un hecho evidente: es una de las mayores plataformas logísticas no ya de Europa, sino del mundo. Vaya solo o acompañado.Sin embargo, también pensé que esto de la cooperación era una buena señal, sobre todo cuando juegas en primera división, y en los puestos de arriba, porque demuestra una cierta forma de hacer las cosas, un taranná particular, una forma de ser y de pensar.La semana pasada, al oír el anuncio que hacían al alimón Artur Mas y Kris Peeters, el ministro-presidente de Flandes, sobre la organización de una misión económica conjunta, no pude más que pensar en esa apuesta tan flamenca de colaborar para ganar. Y también en que la logística, sin ninguna duda, debe tener un papel protagonista en este viaje ya que Catalunya es un gran hub de distribución en el Mediterráneo, pero Flandes lo es en Europa y, obviamente, se pueden crear sinergias muy interesantes y atraer nuevas inversiones y proyectos de futuro uniendo logísticamente ambos territorios.Decía el president Mas que países y economías con intereses similares pueden salir juntos al exterior para internar situarse mejor en el mundo y, en este sentido, no cabe de duda de que Flandes puede aportar mucho a Catalunya en el terreno logístico. Y Catalunya también puede aportar su granito de arena, sin duda.Esta misión económica conjunta entre Flandes y Catalunya no está aún definida y, por tanto, quedará mucho trabajo organizativo por hacer, pero yo empezaría a recordar ya al Govern de Catalunya que la logística es uno de los motores económicos tanto de esta comunidad autónoma como de Flandes, lo que le acredita para tener este papel destacado en el viaje.La misión sería un marco ideal para crear sinergias entre los puertos catalanes y flamencos, entre sus respectivas plataformas logísticas, entre los operadores logísticos de ambos lados, los transitarios o los agentes de aduanas, facilitando el intercambio comercial de un lado a otro y el movimiento de mercancías, para ejercer, ambos, como centros de distribución al continente y al mundo. Es, pues, una oportunidad que no hay que dejar escapar.