La bañera y el Ministerio embarrado
- 01 marzo 2024 05:20
- Última actualización
01 marzo 2024 05:20
En el vestíbulo de la planta 3ª del Ministerio de Transportes, donde hasta hace nada había unos ajados sofás donde la prensa torturaba sus riñones a la espera de conclusiones tras las tediosas negociaciones sectoriales, brilla ahora un inmenso cuadro de Antoni Tàpies como parte de esa colección de arte de Enaire de la que ya hablamos y que ha invadido la sede ministerial.
Un único elemento gráfico forma parte del cuadro, y además reconocible para la gente de campo como servidor, lo cual es todo un hito dentro de la obra de un pintor como Tàpies, exponente universal del “informalismo”.
Ese elemento es ni más ni menos que una inmensa bañera, frente a la que este humilde suricata se plantó con desconcierto el martes nada más terminar la rueda de prensa del “caso Ábalos” y haber escuchado al actual ministro, Óscar Puente, reclamar a los medios de comunicación que “si queremos limpiar, tenemos que dejar de embarrar”. Es cierto que la prensa debe hacer permanente autoanálisis de todas las imprecisiones que se escupen en estos “procesos”, llenos de cuñados que actúan como fuentes. Ahora bien, todos sabemos de dónde nace el barro y qué y quiénes necesitan una ducha y luego un baño. Qué visionario el tipo que ha plantado ahí la bañera de Tàpies. Qué gran símbolo para la legislatura.
