El pasado viernes la Autoridad Portuaria de Valencia reunió a su Consejo de Administración en la sesión más importante del año. El orden del día parecía escueto, breve, pero, entrando en el detalle de los puntos a tratar, había al menos un par que despertaban el interés periodístico.
Por un lado, se analizaba para su aprobación su Plan de Empresa 2019. Y, por otro, se llevaba al Consejo la propuesta de aprobación de los Pliegos de Bases y Pliegos de Condiciones del concurso para la construcción y explotación de la nueva terminal de contenedores de la Ampliación Norte del Puerto de Valencia. Ahí es nada.
Además, en medio de la vorágine generada por las perspectivas de futuro de ambos proyectos y las cifras avanzadas de millones de euros en inversiones y retornos, también hubo un momento para hablar de los cinco millones de contenedores movidos por los muelles valencianos en los últimos 12 meses -por cierto, este récord también se logrará en el año natural, no se piensen que me olvido-.
Hito histórico en el sistema portuario español, quizás faltó algo de apoyo desde Madrid en la difusión de la hazaña confirmada hace unas semanas. No digo que se tuvieran que escribir epoyeyas o poesías trovadorescas sobre el asunto, pero tampoco hubiera estado mal que desde la casa de todos los puertos de interés general se destacara la buena labor realizada, tanto por Valenciaport, como por su comunidad portuaria. La promoción nunca viene mal y más si tenemos en cuenta que gran parte de la sociedad desconoce cómo funciona un puerto o cuáles son sus beneficios. A fin de cuentas, la Autoridad Portuaria de Valencia depende de ellos, son ellos ¿no? Pues nada, no hubo mención oficial. No hubo orgullo desde Madrid. ¿A ver si no se enteraron? Espero que sí.
Por cierto, tampoco se crean que somos especiales. Cuando la Autoridad Portuaria de Bahía de Algeciras consiguió rebasar los 100 millones de toneladas en un año tampoco lo festejaron con ellos. Qué penita que se desaprovechen las buenas noticias para informar (y formar) de las actividades que surgen de los puertos. Quizás así la cosa cambiaría. Les comento: en casa la satisfacción por el récord existe pero (subrayo el pero) hay a muchos a los que les toca un poquito la moral. Parece que les molesta todo lo que huele a portuario. Vaya tela. Así, tras conocerse que superaríamos los cinco millones en 2018 y que las relaciones entre los implicados en el tema de la ZAL del puerto eran buenas, algunos políticos salieron a vociferar sobre el puerto. Again.
Todos estábamos ya con las previsiones de futuro, analizando el proyecto de la Ampliación Norte y las perspectivas negativas de no seguir apostando porque el enclave crezca... cuando Podem reclamó en Les Corts que se suspenda la tramitación del plan especial para el desarrollo de la ZAL con objeto de evaluar otras alternativas. ¿Lo qué? Ni que el proyecto de la ZAL les pillara de nuevas. Si tanto les preocupaba, ¿por qué no empezaron la legislatura con este asunto? Da la sensación que actúan a golpe de la noticia del día. Como sucedió con el proyecto de la V-21. No digo que no puedan hacerlo o que no tengan razón... pero van a destiempo.
Ahora lo único que toca es felicitar a los 38.000 profesionales que trabajan en el puerto porque, como dijo el presidente de la APV, Aurelio Martínez, tras el Consejo: “El Puerto de Valencia solo es el notario de la carga, el verdadero mérito de los cinco millones de TEUs movidos a lo largo de un año o de los 5,2 que llegaremos a contabilizar en 2018 es de la Comunidad Portuaria, de todas aquellas personas y empresas que hacen posible que las mercancías pasen por nuestros muelles”.
Así que enhorabuena a todos los que trabajan por la marca #PuertodeValencia.
