Pica en Madrid
- 22 octubre 2021 01:00
- Última actualización
21 octubre 2021 23:40
Ya les dije hace unos días que habían abierto las puertas del corral pandémico de par en par, por lo que llevamos en estampida por los lares logísticos casi ya tres semanas de febril y fabril presencialidad, con el radar, qué quieren que les diga, a punto de estallar.
Queda mucho por encajar en esta nueva normalidad y por aprender a sacar el máximo partido a lo virtual y el verdadero partido a todas y cada una de las formas que tiene lo presencial.
De las últimas incursiones en el mundo real de este servidor ávido de actualidad, permítanme que me quede por encima de todo con la visita a Madrid el martes del presidente del Puerto de Barcelona, que compareció en el Propeller en esa atmósfera precavida y mútua de quienes saben que deben, pueden y van a entenderse pero, a su vez, no terminan de abstraerse de ese clima general que todo lo tensiona y a menudo desvirtúa.
En cualquier caso, como no podía ser de otra forma, Damià Calvet, vino, vio y venció desde la sencillez y la lógica aplastante de un discurso basado en la cooperación, en la coordinación, en el interés general, en el bien común y en la mulplicación de la competitividad en favor de la cadena logística global.
Así de sencillo, así de pragmático, así de realista y así de fácil puede llegar a ser poner una “pica en Madrid”.