Ubicada en el extremo sur del Paseo de la Ría, la reconstrucción de este símbolo de la ciudad ha tenido un coste superior a 142.600 euros y ha sido diseñado por los arquitectos Antonio López y José Suárez bajo la iniciativa y posterior licitación por parte de la Autoridad Portuaria de Huelva.
Pilar Miranda, ha destacado durante el acto de inauguración que “para el Puerto de Huelva es una prioridad continuar trabajando en actuaciones que repercutan en beneficio de nuestra ciudad, como esta reconstrucción que ya pueden disfrutar los ciudadanos y que es una fiel réplica de la Fuente de las Naciones, una de las principales señas de identidad arquitectónica de Huelva, que nunca debió perderse en la década de los 60 y que devolvemos hoy a la ciudad.”
También ha agradecido a Diego Lopa, escritor, presentador y divulgador de la memoria onubense y a Francisco José Martínez, catedrático de la Universidad de Huelva e investigador de mitos y leyendas de la ciudad, “su apoyo e implicación como impulsores de esta iniciativa junto con la Autoridad Portuaria ya que han aportado su cariño, toda su ilusión y conocimiento al proyecto desde la primera visita que me hicieron al Puerto para hacer realidad esta Fuente como parte de las señas de identidad de Huelva y su puerto”.
Asimismo, Miranda ha destacado la labor de investigación realizada por los arquitectos Antonio López y José Suárez para recuperar de la forma más fiel posible la construcción original de la Fuente de las Naciones, y a la empresa constructora Díaz Cubero, el esmero con el que ha llevado a cabo la construcción y acabado de este lugar histórico para los ciudadanos de Huelva.
Además, la presidenta del Puerto de Huelva ha añadido que “desde el Puerto de Huelva continuamos trabajando para mantener y recuperar nuestro patrimonio arquitectónico, poniendo en valor nuestros Bienes de Interés Cultural.” Muestra de ello, ha sido la rehabilitación del Monumento a Colón, “que ya hemos puesto a disposición de la sociedad onubense en perfecto estado de restauración y con plenas garantías de conservación, y que se suma a otros proyectos de recuperación patrimonial en los que estamos trabajando, como la recuperación del Muelle de Tharsis, cuya rehabilitación ya hemos comenzado.”
Por su parte, Francisco José Martínez, catedrático de la Universidad de Huelva, ha señalado que “la memoria colectiva de Huelva debe vivir en nuestros días con recuerdos felices que se hacen realidad. No debemos quitar o dejar abandonados nuestros edificios y elementos arquitectónicos, y los que perdimos debemos luchar para recuperarlos, cómo está magnífica Fuente de las Naciones, que gracias a la autoridad portuaria y al esfuerzo de técnicos, arquitectos, artistas, paisajistas, albañiles y jardineros podemos hoy disfrutar”.
El escritor, presentador y divulgador de la memoria onubense, Diego Lopa ha puesto de relevancia en unas palabras llenas de recuerdos y de vivencias de adolescencia, cómo la Fuente era el destino de sus paseos en las mañanas de los domingos y cómo este monumento es memoria viva de varias generaciones de onubenses.
Durante su intervención, los arquitectos Antonio López y José Suárez han subrayado que se trata de una obra arquitectónica “de factura muy cuidada, que en 1917 ya formaba parte de la corriente denominada arquitectura regionalista, que en aquella época empezaba a emerger, y cuyos mejores exponentes podemos observar a través de las obras realizadas en la Exposición Universal de Sevilla de 1929”.
Este proyecto de recuperación nace con el objetivo de devolver este elemento histórico a la ciudad de Huelva, que se encontraba originariamente en la Avenida Francisco Montenegro y que fue demolida en los años sesenta del siglo pasado.
La recreación inaugurada hoy respeta en todo momento el diseño de la construcción original mediante una extensa labor de investigación documental, y se integra en un espacio ciudadano como es el Paseo de la Ría y la reciente rehabilitación de la avenida Francisco Montenegro.
La antigua Fuente o Banco de las Naciones americanas fue inaugurada el día 9 de julio de 1917. Este conjunto de carácter escultórico, fue construido a modo de “descansadero” y se situada a unos 500 metros del Muelle embarcadero de la Compañía Rio Tinto, justo donde actualmente se encuentra el estadio Nuevo Colombino.
Realizada mediante ladrillo aplantillado, cerámica vidriada y elementos de forja, se conformaba mediante un banco corrido con respaldo y de forma elíptica. En el centro del conjunto se situaba el elemento arquitectónico de mayor relevancia que albergaba la fuente de agua potable y el escudo de la Junta de Obras del Puerto, a cuya iniciativa se debía el proyecto. Igualmente, exhibe el escudo de España y de diez países del continente americano como Uruguay, Colombia, Argentina, República Dominicana, Estados Unidos, Cuba, Brasil, Venezuela, Chile y Bolivia.
En su recreación se han empleado los mismos materiales tradicionales originales: ladrillo cerámico, azulejos y elementos de forja. Por otro lado, se encuentra la fuente contemporánea, realizada con materiales actuales.