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Safety First

El “Nazmiye Ana”, el mercante que volcó  en la noche del viernes en el Muelle del Centenario del Puerto de Castellón causando la muerte a dos trabajadores de la mar, un tripulante de nacionalidad india y un estibador español cuyo cuerpo aún no ha sido hallado, lucía también en su puente, con letras pintadas en rojo sobre fondo blanco,  las palabras “Safety First”, sumergidas ahora bajo el agua como macabro recordatorio de lo que jamás debemos olvidar. 

  • Última actualización
    31 mayo 2021 16:13

La tragedia está siempre al acecho en el transporte marítimo, el más global de los grandes sectores  comerciales del mundo, pero también uno de los más peligrosos. La posibilidad de accidente o naufragio durante la navegación se asume generalmente como un riesgo intrínseco a la propia actividad. Y a pesar de los considerables avances tecnológicos y en materia de seguridad que se han incorporado a los buques, los accidentes se siguen sucediendo prácticamente en todas las rutas y clases de buque, como el que sufrió la pasada semana  en Sri Lanka el portacontenedores “X-Press Pearl”, tras una explosión química que obligó a evacuar a su tripulación causando dos heridos. 

También en el refugio del puerto, al abrigo del muelle, cuando el barco “descansa” para la carga y descarga,  la seguridad sigue siendo lo primero, más cuando la interacción entre los equipos humanos del buque y de la terminal, tripulación y estibadores, se produce en un entorno de inherente riesgo como el que forman el barco, los equipos de manipulación y  la carga. 

Hace diez años, el 10 de junio de 2011 a las 13:38 horas, el portacontenedores “Deneb”, atracado en el Puerto de Algeciras, al recibir el contenedor que hacía el número 150 comenzó a escorar a estribor hacia el muelle hasta quedar apoyado contra el mismo, llegando a alcanzar una escora de 75°. Los estibadores y tripulantes que estaban sobre cubierta abandonaron el buque saltando al agua o al muelle. En cambio, quienes estaban en sus camarotes o en la sala de máquinas no pudieron salir hasta minutos después de que el buque quedara apoyado contra el muelle. Felizmente, y a diferencia de los sucedido en Castellón, el resultado fue de dos tripulantes heridos que no precisaron hospitalización, y varios contusionados.

Diez años después del vuelco sin víctimas del portacontenedores “Deneb” en Algeciras, la tragedia del “Nazmiye Ana”  ha provocado una profunda conmoción y sitúa a la industria marítimo-portuaria ante una descarnada realidad que debe afrontar con políticas de seguridad más proactivas

En su informe, la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM) concluyó que el accidente de Algeciras se produjo a causa de errores en la planificación y ejecución de su carga, que hicieron que se alcanzara una condición de carga en la que el buque no tenía estabilidad suficiente y volcó.

Diez años después, la tragedia del “Nazmiye Ana” ha provocado una profunda conmoción por la pérdida de dos vidas humanas y sitúa a la industria marítimo-portuaria ante una descarnada realidad que debe afrontar con políticas de seguridad más proactivas. Las autoridades deberán conducir ahora la investigación que determine las causas del accidente y establezca las responsabilidades a que hubiere lugar.

En su última Memoria  publicada, correspondiente al año 2019, la CIAIM cifró en 263 las notificaciones de accidentes e incidentes marítimos analizadas, de los que investigó un total de 26. En la Introducción, Francisco Javier Martínez Couto, vocal de la Comisión, sostiene que la prevención en materia de accidentes marítimos en España “es una asignatura que no parece que hayamos superado con nota de suficiente”. Safety First.  La Seguridad es lo Primero. Antes, ahora y siempre.