Tarragona. Las obras, que se alargarán hasta principios de marzo de 2025, contemplan la ampliación del túnel de Roda de Berà para adaptarlo al ancho mixto, mediante la implantación del tercer carril en ambas vías, lo que permitirá la circulación de trenes de ancho estándar e ibérico.
Para ello, se aumentarán las dimensiones del paso actual mediante el rebaje de la rasante del túnel, de casi 422 m de longitud, para cumplir con los estándares de interoperabilidad que requiere el tercer carril, permitiendo, entre otras ventajas añadidas, la circulación de trenes con velocidades de hasta 120 km/h, solventando las limitaciones de velocidad existentes en la actualidad gracias a la mejora de la infraestructura ferroviaria.
Además, en el exterior del túnel, también se rebajará la rasante de las vías, se instalará igualmente vía en placa en los tramos contiguos al túnel, se construirán muretes guardabalasto, y se ejecutarán depósitos de recogida de vertidos y zonas de instalaciones auxiliares. Del mismo modo, y derivado de los estudios de vibraciones, se prevé la colocación de mantas antivibratorias y pantallas para mitigar el impacto acústico generado por las circulaciones ferroviarias.
Más allá de la adecuación del gálibo en el túnel para permitir el transporte de mercancías y la adaptación de las vías al ancho mixto, también se ejecutarán obras en vía, sistemas de electrificación e instalaciones de Control, Mando y Señalización en enclaves de gran importancia para el funcionamiento del sistema ferroviario de la red de ancho convencional del sur de Barcelona.
millones de Euros. La actuación ferroviaria en el túnel de Roda de Berà tiene un presupuesto de 16 millones de euros
A pesar de que el gran beneficio de las actuaciones en el tramo entre Tarragona y Sant Vicenç de Castellet repercutirá en el tráfico de mercancías, desde Adif también remarcan que las obras también beneficiarán al transporte de viajeros, ya que “se dispondrá de infraestructuras e instalaciones más modernas y con mayores parámetros de eficacia, eficiencia, disponibilidad, funcionalidad, calidad y confort”.
Las obras que se inician hoy forman parte del conjunto de actuaciones que se están llevando a cabo del Corredor Mediterráneo en Catalunya.
Recientemente, Adif finalizó una de las fases más complejas para la adaptación al ancho estándar del nudo ferroviario de Castellbisbal, que permite avanzar en las conexiones con las regiones por las que discurre el Corredor Mediterráneo y con Europa.
En este caso, se trataba de una de las actuaciones de mayor envergadura ejecutadas en la última década en uno de los nodos más estratégicos de la red ferroviaria española, pues el nudo de Castellbisbal, conocido como La Puerta a Europa, es uno de los núcleos más complejos de la red ferroviaria y constituye un enclave esencial para el Corredor Mediterráneo.
En este sentido, el conjunto de actuaciones realizadas a lo largo del tramo Barcelona-Vilanova-Sant Vicenç de Calders, han supuesto una inversión de 143 millones de euros, a los que hay que sumar los otros 195 millones de euros invertidos entre 2018 y mediados de 2024, que se han destinado a actuaciones en las diferentes líneas que conforman la red de ancho convencional en Tarragona.