Diario del Puerto ha hablado con Rodrigo Garro, gerente de Ventas en TMEIC, para conocer su análisis sobre la digitalización en los puertos. “En TMEIC Port Technologies se cree firmemente que esta digitalización no solo aumenta la eficiencia operativa, sino que también mejora la seguridad, ayuda a reducir las emisiones de CO2 y reduce los costos operativos. La capacidad de monitorizar y controlar las operaciones a través de sistemas digitales permite una gestión más precisa y una mejor toma de decisiones”.
Rodrigo Garro cuenta que desde TMEIC se enfrentan a varios retos y objetivos para el futuro como, por ejemplo, los avances en Inteligencia Artificial y Machine Learning: “La empresa está desarrollando soluciones que utilizan estas tecnologías para prever y responder a problemas operativos antes de que ocurran, como el mantenimiento predictivo. También emplea técnicas de IA para analizar contenedores mediante fotografías y detectar potenciales daños estructurales antes de que sean manipulados”.
También Rodrigo Garro hace hincapié en conceptos muy punteros en la actualidad como son la ciberseguridad o la sostenibilidad, ya que “con la creciente digitalización, la protección contra amenazas cibernéticas se vuelve crucial”. Y añade que TMEIC se enfoca en implementar medidas robustas de ciberseguridad que cumplan con la ISO27001 para proteger los datos y las operaciones de sus clientes.
“En términos de sostenibilidad, tenemos que continuar innovando en tecnologías que reduzcan la huella de carbono de las operaciones portuarias es una prioridad”. Por ello, desde TMEIC ofrecen soluciones de Onshore Power Supply para la conexión de los buques a su llegada a puerto y de hibridación de maquinaria para reducir el consumo de diésel.
El sector marítimo enfrenta varios desafíos, como la globalización, conflictos bélicos, ataques a buques, regulaciones ambientales más estrictas y la falta de trabajadores cualificados. La tecnología, según el entrevistado Rodrigo Garro, puede mitigar estos problemas de varias maneras, como a través de “la automatización, formación y profesionalización, atractivo del sector y flexibilidad operativa”.
En su opinión, “hay que reducir la dependencia de la mano de obra, permitiendo que las operaciones continúen con menos personal y mayor eficiencia”. Y para ello, existe la posibilidad de “utilizar simuladores avanzados y realidad virtual para capacitar a los trabajadores, mejorando sus habilidades y preparándolos para operar tecnologías complejas”.
“Las tecnologías avanzadas y la digitalización hacen que el sector sea más atractivo para los jóvenes profesionales que buscan carreras en campos innovadores y tecnológicos”, considera Garro.