Deambular por el averno
- 16 mayo 2024 05:20
- Última actualización
20 mayo 2024 15:16
Es de todos conocido que la mayor parte de los accidentes registrados en la alta montaña se producen durante los descensos. Ya sea por acumulación de cansancio o por el hecho de bajar la guardia después de haber hollado la cima, lo bien cierto es que las estadísticas son claras y contundentes.
No es de extrañar, por lo tanto, que en el argot montañero no se puede hablar de haber conquistado una cima hasta que no has regresado con vida para contarlo ya que, como casi siempre, es más satisfactorio vivir que subir a lo alto de una montaña y quedarse allí de comida para las aves carroñeras.
En contra de las previsiones iniciales, digo bien, que pronosticaban un año difícil para los puertos españoles (reconozco que en su día me uní a esa espiral de negatividad), los tráficos hasta el mes de marzo muestran una ligera alteración en positivo de las previsiones ya que se ha conseguido mantener las cifras del pasado año e incluso superarlas ligeramente.
Por ser muy fieles a la realidad, conviene señalar que sólo con el crecimiento de tres grandes (Algeciras, Barcelona y Valencia) se ha superado el registro total del primer trimestre de 2023. Según su forma de presentación, el tráfico con mayores crecimientos es el contenerizado (10%), especialmente el de contenedores en tránsito (17,5%), aunque no ha ido del todo mal el tráfico de contenedores de importación y exportación (3,8%).
Sólo con el crecimiento de tres grandes (Algeciras, Barcelona y Valencia) se ha superado el registro total del primer trimestre de 2023
¿Debemos pensar que la tendencia se va a prolongar en el tiempo? Pues no hay razones para pensar lo contrario. El producto interior bruto de España en el primer trimestre de 2024 ha crecido un 0,7% respecto al trimestre anterior y la variación interanual es del 2,4%. Si se cumplen las previsiones de primavera de la Comisión Europea, publicadas ayer miércoles, la proyección es que el país cierre el año con un crecimiento del PIB del 2,1%.
Evidentemente, la coyuntura sociopolítica del globo influye directamente en los tráficos, pero igual que la guerra en Ucrania (iniciada hace ya un par de años, ojo) ha provocado una caída de determinados movimientos económicos con España, la crisis del Mar Rojo también ha generado un incremento de los contenedores de transbordo en los grandes puertos españoles de interés general.
Más allá de lanzar pronósticos a lo tonto, creo que es bueno poner el foco sobre dos certezas. La primera de ellas es que los puertos están al servicio de la economía y se activan en función de la coyuntura de cada momento; lo realmente importante es estar preparados para responder adecuadamente cuando llega la oportunidad.
La segunda certeza es que conviene jugar con precaución y no vender nuestra victoria hasta que hayamos llegado al campo base. El año es muy largo y ni siquiera hemos alcanzado el ecuador.
La primavera apenas tiene un mes de vida y estamos ahora en plena carrera cubriendo las tropecientas convocatorias que nacen por doquier y sin miramientos. El día a día no nos deja ver mucho más allá, así que no queda otra que dejar de lado la intuición y abrirnos paso machete en mano para poder vislumbrar aunque sea una pequeña parte del horizonte.
Lo demás, caminar a toda prisa sin sentido y sin un objetivo definido, es lo más parecido a deambular por el averno. Te acabas quemando.