MARÍTIMO · La electrificación y la utilización de combustibles alternativas abren el camino hacia las 0 emisiones
Administración y operadores portuarios privados, aliados en la descarbonización
Todos los operadores portuarios en España han iniciado acciones para reducir sus emisiones contaminantes.
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En los últimos años, la conciencia sobre las consecuencias del cambio climático y la necesidad de reducir las emisiones de carbono ha llevado a las industrias a poner en marcha estrategias para lograr este objetivo.
VALENCIA. Los entornos portuarios y las empresas que realizan su labor en los mismos ya han comenzado a implementar soluciones para mitigar su impacto en el entorno, donde la colaboración público-privada cobra un especial protagonismo.
Uno de los enfoques más efectivos para reducir las emisiones de carbono en los puertos es la adopción de fuentes de energía renovable y la electrificación de la maquinaria portuaria. Las Autoridades Portuarias comienzan a invertir en la instalación de paneles solares y turbinas eólicas para generar electricidad limpia y sostenible, lo que sirve para a los operadores privados para alimentar equipos y maquinaria, como grúas, vehículos y sistemas de iluminación.
La construcción de infraestructuras portuarias más sostenibles es otro aspecto clave para reducir la huella de carbono. Los puertos están implementando medidas de diseño verde en la construcción y renovación de sus instalaciones, utilizando materiales sostenibles, sistemas de iluminación eficientes y técnicas de construcción ecológicas.
Todos los grupos empresariales que gestionan terminales de contenedores en España, en mayor o menor medida, han comenzado a andar el camino de la descarbonización, ya que todas buscan reducir a 0 sus emisiones contaminantes.
Hutchinson Ports BEST ha elaborado un plan para llegar a 2040 con cero emisiones. Este plan contempla la realización de pruebas piloto con la maquinaria que queda por descarbonizar de manera que esté propulsada por combustibles alternativos, así como la construcción de nuevos puntos de conexión eléctrica para que todos los contenedores refrigerados que lleguen a la terminal mantengan su temperatura sin ninguna influencia por el medio ambiente.
En ese sentido, la firma “proporciona una ventaja competitiva a importadores y exportadores que eligen la sostenibilidad como un elemento central de su estrategia”, tal y como recalca Guillermo Belcastro, CEO de la mercantil. En definitiva, “BEST ayuda al buque a estar menos tiempo en el puerto, reducir su velocidad en el viaje hacia el siguiente destino y generar menos emisiones a la atmósfera”, puntualiza Belcastro, que además pone el acento en que también se reduce el tiempo de espera del camión para generar menos emisiones en el puerto.
A todo ello, hay que sumarle el proyecto de electrificación del muelle de la terminal que está llevando a la Autoridad Portuaria de Barcelona en BEST para que los buques puedan conectarse a la electricidad procedente de fuentes renovables durante su estancia en el puerto. Con este proyecto, podrán apagar los motores auxiliares y conectarse a la red eléctrica, sin tener que usar combustible.
EL DATO
450
Millones de euros. Los puertos de interés general del Estado en España requerirán de una inversión total de 450 millones de euros hasta 2030 para electrificar la operativa en los muelles de cruceros, ferris y contenedores. Así lo calculó el pasado año Ocean Capital Partners (OCP), firma internacional especializada en el sector portuario, estimando además la creación de más de 1.000 nuevos puestos de trabajo directos e indirectos por la puesta en marcha de estos proyectos de electrificación.
Por su parte, Terminal Investment Limited (TiL) revisa “de manera constante” sus planes de inversión “para asegurarnos que tengan en consideración nuestras aspiraciones de reducción de emisiones y nuestros objetivos de mejora de la eficiencia operativa”, tal y como reconocen desde el grupo.
Una de las patas de esta estrategia es la de asociarse, siempre que es posible, con productores de energías renovables “para generar electricidad in situ o junto a nuestras instalaciones, como ya hemos hecho en algunos lugares”.
La nueva terminal de contenedores proyectada en el Puerto de Valencia será “una de las terminales más modernas y sostenibles del mundo”, ya que el origen de la electricidad será 100% de fuentes renovables y contará con un sistema de gestión ambiental al máximo nivel (certificación EMAS). “Además -subrayan desde TiL- permitirá que los barcos apaguen sus motores y se conecten a la red eléctrica a su llegada a puerto”.
En el caso de CSP Spain, fuentes de la compañía aseguran que la búsqueda constante de nuevas oportunidades tecnológicas permite una mejor eficiencia de las operaciones y por tanto un mejor desempeño energético. Por ello, “la adquisición de maquinaria con posibilidades de hibridación y la electrificación, los procesos de remotorización y la mejora de la calidad de los combustibles utilizados” son acciones que la compañía está realizando en los últimos años. A eso habría que añadir la implantación de instalaciones y procesos con energías renovables, sobre todo en el ámbito fotovoltaico.
De hecho, el operador portuario chino ya ha puesto en servicio RTGs híbridos, “con una fuerte inversión provocada por esta tecnología”, provocada en buena parte por el alza de los precios sufrida en los últimos meses.
CSP Spain subraya “los esfuerzos operativos para mejorar el desempeño de la maquinaria”, que consiste en “un ajuste del tipo de maquinaria a utilizar en función de los tráficos a operar”.
Colaboración
Hoy por hoy, muchas terminales están apostando por la paulatina electrificación de su maquinaria y por la utilización de nuevos combustibles limpios como uno de los caminos hacia esas 0 emisiones, donde la colaboración entre la Administración Pública (Autoridades Portuaria) y los operadores privados (terminal) se convierte en un aspecto clave para lograr el objetivo.
Un ejemplo de la primera estrategia lo encontraríamos en Hutchinson Ports BEST, terminal semiautomatizada, que utiliza grúas mayoritariamente eléctricas con fuentes renovables. Aunque mantiene algún tipo de maquinaria menor impulsado todavía por combustibles fósiles, “los últimos equipos de este tipo adquiridos funcionan con sistema híbrido lo que reducen las emisiones de CO2 hasta en un 40% respecto al resto, gracias al uso de un sistema de energía regenerativa de alta eficiencia”, tal y como enfatiza Guillermo Belcastro.
A nivel de Grupo, hay toda una estrategia de sostenibilidad que cuenta con iniciativas para conseguir minimizar su huella de carbono, como la instalación de paneles solares, la electrificación de la flota de vehículos o la electrificación de los muelles, entre otras.
En la actualidad, cada contenedor que pasa por BEST ahorra un 65% en emisiones respecto a una terminal convencional. “Esta característica junto con la terminal ferroviaria más grande de la región y la electrificación de los muelles que estamos llevando a cabo en colaboración con la Autoridad Portuaria de Barcelona, nos permite brindar una propuesta única en el Mediterráneo”, enfatiza Belcastro.
Hutchison Ports BEST tiene un plan de descarbonización para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 80% en 2030 y alcanzar las cero emisiones netas antes del 2040.
Por su parte, TiL, además de apostar por la electrificación de maquinaria en su futura terminal valenciana, se encuentra inmersa en la fase de pruebas del Proyecto H2Ports a través de MSC Terminal Valencia, que testa la utilización de hidrógeno como combustible de maquinaria portuaria.
Gracias a la hidrogenera instalada en la dársena valenciana, una reachstacker podrá almacenar hidrógeno en su pila de combustible, suministrar energía a los motores eléctricos o devolverla a las baterías en función de la demanda de la tarea, al tiempo que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación acústica en comparación con una alternativa diésel y con un rendimiento similar.
La eliminación del motor diésel, la transmisión y otros componentes de accionamiento mecánico de la máquina puede ayudar a los puertos a reducir los costes de explotación.