MARÍTIMO · La Delegación de Servicio Público encomendada por la Región de Nueva Aquitania a la CCI de Baiona en 2009 fue prorrogada un año
Una sociedad portuaria sustituirá en 2024 a la Cámara en la gestión del Puerto de Baiona
El puerto vasco-francés de Baiona acoge unas 56 empresas y genera 3.500 puestos de trabajo directos e indirectos.
La gestión del puerto vasco-francés de Baiona será transferida en 2024 a una sociedad portuaria que se convertirá en concesionaria de la infraestructura en lugar de la Cámara de Comercio e Industria (CCI) Baiona Euskal Herri, que, sin embargo, participará en el capital de la nueva empresa.
BILBAO. La Delegación de Servicio Público (DSP) encomendada a la Cámara de Comercio e Industria de Baiona-Euskal Herri para la gestión del Puerto de Baiona está a punto de expirar, tras agotarse el período de 15 años para el que fue creada en 2009 y ser prorrogada un año adicional a finales de 2023.
Por tanto, a partir de enero de 2025, la CCI dejará de ser la entidad gestora directa de esta infraestructura portuaria que administran de forma conjunta la Región de Nueva Aquitania y la propia CCI, las cuales han consensuado la creación de una empresa portuaria que se haría cargo de su gestión.
Novedades legislativas
Este cambio en el modelo de gestión responde a las últimas novedades legislativas promovidas por el Estado francés, bajo cuya supervisión se encuentran las Cámaras de Comercio e Industria regionales, según ha explicado a Euskomedia el consejero regional de Nueva Aquitania y delegado de Cooperación transfronteriza y Eurorregión, Puertos y Aeropuertos, Mathieu Bergé. A raíz de estos cambios, las cámaras de comercio ya no tendrán capacidad para realizar directamente delegaciones de servicios público, ni para asumir responsabilidad financieras si su gestión no es la adecuada.
El cambio en el modelo de gestión responde a las últimas novedades legislativas promovidas por el Estado francés
A pesar de que la Región de Nueva Aquitania ha mostrado su satisfacción por el trabajo realizado por la Cámara de Comercio e Industria Baiona-Euskal Herri, ha optado por un modelo de gestión que le permita seguir trabajando con el gestor histórico del Puerto de Baiona, antes incluso de que pasara a ser propiedad de la Región en 2006.
Figura de la nueva sociedad
La figura elegida para la nueva entidad concesionaria sería el de “sociedad portuaria”, en la misma línea que en Brest, donde la gestión está encomendada a la Sociedad Portuaria Best-Bretagne. Se trata de una sociedad limitada de capital público, aportado por la Región, la CCI Baiona Euskal Herri y también de la CCI des Landes, que regresaria a su capital, sin descartar la entrada de otros agentes.
Esta nueva sociedad portuaria, cuyas características y composición accionarial deberán perfilarse a lo largo del presente año, asumiría las funciones, el personal y las actividades que la CCI lleva a cabo desde que le fue encomendada la Delegación de Servicio Público en el año 2009.
Transición energética y valorización del suelo
El cambio en el modelo de gestión del Puerto de Baiona no interferirá en la Convocatoria de Manifestación de Interés lanzada el pasado mes de noviembre por la Cámara de Comercio e Industria Baiona Euskal Herri (CCIBPB) para avanzar en sus objetivos de descarbonización, transición energética y valorización económica del suelo portuario.
La actual entidad gestora de la infraestructura portuaria ha realizado a tal efecto un exhaustivo inventario de las emisiones de carbono en sus superficies concesionales hasta finales de 2023, cuyo trabajo de consolidación de la información a nivel nacional se extenderá durante el primer semestre de 2024. Los resultados de este diagnóstico permitirán validar parcialmente las orientaciones recomendadas por los proyectos que responden a la Convocatoria de Manifestación de Interés, cuyo plazo de presentación de proyectos finaliza el próximo 26 de febrero.
El Puerto de Baiona ocupa el puesto 13 entre los puertos franceses y acoge alrededor de 56 empresas, generando más de 3.500 puestos de trabajo directos e indirectos con un impacto económico de 530 millones de euros anuales.